Hoy no quedé contigo, que yo
sepa...pero nos vimos. Tú yacido, yo completamente sorprendido.
Quedábamos en tu casa y también en el centro pero hoy tu morada se
tornó oscura...llena de gentío. Todos hablaban de ti, otros
contigo...aunque tú no decías nada, esperábamos un suspiro. La
hierba crece en la peña, ¿quién la acalda? En pocas semanas crece
y nadie la trata. Se come la caja y el tablón y hasta el emboque
triste y en mano, se ha quedado huérfano de hermano. Todos creemos
que esa memoria, solo unos pocos la tenían...¡eras un privilegiado!
Otros también la tenían pero ahora, te has ido con ellos. Ya jamás
me contarás tus historias ni disfrutaré de tu compañía. Tantos
años has pasado que solo dos de ochenta y tres, me han servido para
haberme despertado. Busqué quien pudiera hacer de cronista sin
llegar a costumbrista. Hallé en tus ganas de contarlo...eso...
ganas, franqueza y consideración por todo lo que habías pasado. Me
contaste lo de tu padre, sin el mas mínimo atisbo de rencor, cuando
la guerra civil se lo llevó, y no por la guerra en sí, sino por la
represión que lo mató. Me hablaste del primer jugador internacional
que tuvo Cantabria, allá por el año 38 y que resultó ser de
Uldá....y así me lo comentaste, tremendamente orgulloso. También
el fútbol fue lo tuyo aunque mejor ..los bolos. Quizás todos
pequemos de contradicciones y en eso nos parecemos, lo que hoy es muy
blanco mañana es negro. Unos dirán que no lo fuiste tanto, otros en
exceso; pero estos dos años oyéndote contar mil y una historias
del pueblo, solo con una palabra me quedo, respeto
En vida , algunos recordaron el peso
de tu valía. No sé si ahora te llegarán homenajes. Creo que los
mereces. Ay! si antes lo hubieran hecho...que orgulloso te
sentirías. La última vez que nos vimos, los bolos asturianos te lo
reconocieron y me comentaste la alegría con que lo habías recibido.
‘Napoleón’ de la bolera, te llamaron. Cuarenta y siete años
con el mono de faena, cariño, pasión y buen trato.
Hoy, toque de queda...como hace años
en Huesca. En aquella ocasión para seguir con tu vida pero en
ésta...para concluirla.
Toñuca y yo pensamos que nunca deberías dejar de
contarla.....
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