16 septiembre 2014

Pasando a limpio el resto del año

Algo faltó en el programa de fiestas de este año... y yo solo quiero que lo lean:


   Todos los años esperamos con ganas que nos traigan el  programa de las ferias. Se acaba el verano, empieza el cole.  En todas las casas se lee con ganas ¿Qué hay nuevo? ¿Qué orquestas? ¿Qué coros?. El último día subiendo del ferial me hago la cuenta que ha pasado un año más, porque para mí los años van del 11 de septiembre de un año hasta el siguiente, ya sé que no es así,  que los años acaban el 31 de diciembre. En mi casa no. Y es el momento de pasar a limpio el resto del año. Estas ferias hay algunos lectores menos. Pasa siempre, a cada uno de nosotros nos falta alguien. Yo este año quiero destacar a dos de mis vecinos/maestros.

La fidelidad, la rutina  la sencillez, el amor al trabajo y la dedicación a los demás son  cinco valores a la baja de este mundo y en este momento, pero que yo admiro por encima de los demás. En el recorrido que cada uno de nosotros hacemos por la vida, nos acompañan personas que dejan huella, por unas u otras razones. En mi camino ha habido muchas, como en el de todos, hoy voy a señalar a dos de ellos, no por ser los más importantes, si, por haberme ayudado a formarme como persona:
 

EL


- LA FIDELIDAD: Asistí a la misa celebración de sus bodas de oro en San Roque. Ser fiel a la misma merienda durante todas las tardes: unas galletas debidamente envueltas en su papel de alumino, con su lata de refresco, con un "detalle importante" si su mujer no se las traía, él no merendaba.  
Seguir asistiendo a todas las romerías y bailes que se ofertaran juntos,  para bailar, sin perder baile, con paragüas, si hiciese falta.
A la excursión a Cádiz, cuando la salud se lo permitió y respetando la salud de ella.

A la virulencia que lleva el ferrocarril, que era el politono de su móvil que sonaba sin parar en tiempo de bolos.
A las excursiones que organiza la peña de las vaquillas a donde fuese, a San Fermín, sin pereza, con curiosidad.
A la familia, a los nietos, a los deportes de cada uno de ellos, a sus resultados.
A sus ideales políticos, contra viento y marea.
A la limpieza de la bolera, a la organización de la misma, al prohibido comer pipas, al prohibido meter bicis.

Al ofrecer asientos a los asistentes, siempre ejerciendo de buen anfitrión
Al Iguña, al fútbol, a la partida, a los entierros, a la lectura del periódico en el Centro cívico, al 15 de agosto en Quevedo, a las gafas de cerca, a los bolos, a las ferias, al campeonato de España de bolos.

A la bicicleta con la que vendió lotería, repartió programas, etc.

  -LA RUTINA: trabajo por la mañana, comida, reposo, partida de cartas en el bar, concurso de bolos, merienda, más bolos, recoger el corrobolos, cenar, tomar la fresca en la calle y mañana más rutina.
   -LA SENCILLEZ: Un ser humano que no quiere aparentar más que lo que es, con sus defectos, con sus virtudes, con sus dificultades, con el saber aceptar el desgaste que produce la edad, sin hacerse jamás el sabiondo, teniendo una sabiduría que ninguno de nosotros ha adquirido de momento, con unas cajas con montones de fotos sin clasificar pero de todas sabía el momento y lo que allí se estaba viviendo y si no sabía, con mucha sencillez lo admitía y buscaba soluciones en forma de otras personas que lo pudieran explicar, que para decir la verdad eran muy pocas ocasiones, con un montón de recuerdos dispuesto a compartir, sin resentimientos, con  el único interés de contar su experiencia vital.   
- EL AMOR AL TRABAJO: Recoger lecherinas para los conejos, leña para la lumbre, limpieza del corrobolos, arreglo del mismo entre concurso y concurso, colgando banderas y bombillas que daban inicio a las ferias, organizando la carrera ciclista, la carrera de caballos, montando el cerrado para las vaquillas, poniendo a tono la bolera, cavando, pintando, rascando, regando, organizando, tendiendo puentes entre árbitros y jugadores, para que estos

pudieran compatibilizar el trabajo con el ocio/deporte, en la agenda más desorganizada que yo he visto nunca, claro q esta agenda era "especial", tenía un solo folio, lleno de puntos negros, rojos. Pero el orden es algo relativo de cada uno y por último y si la ocasión lo requería plantando bolos con 80 años. Buscando sin parar patrocinadores para el libro de ferias, trofeos para los diferentes concursos.
-LA DEDICACIÓN A LOS DEMÁS: ser la vía por la que los jubilados de Molledo puedan viajar en la última fase de su vida, robando tiempo a la familia, a las aficiones. Que la tercera edad de Molledo tuviera su fiesta particular, su comida de hermandad, es un regalo que alguien se hace así mismo, pero también a los demás. La organización de la parrillada que tanto éxito tiene en San Justo.

 ELLA


-LA FIDELIDAD: A Ángel, a sus hijos, a sus sobrinos, a sus hermanos, a sus amigos, a sus conocidos, a los niños, a los clientes de la leche de sus vacas, con las perolas de cada uno en cada escalón de la cuadra bien organizado, a sus gatos, a sus gallinas, a sus praos, y por encima de todo a sus vacas, a las partidas de cartas por las noches, al periódico, a sus ideas políticas, a las elecciones, sin fallar nunca y después para celebrar el día  excepcional, fiel a las rabas y al vermut del Pecas. En la vejez a la televisión, a los gatos, a la manta, a la toquilla, a la lumbre.

-LA RUTINA: Madrugar muchísimo para dar de comer a las vacas, para asearlas como si fueran humanas, para ordeñar, para desayunar de tenedor, patatas, huevos fritos y panceta, sin un problema de colesterol jamás, para llevar las vacas al prao, cruzando su hija OIga la carretera, entonces nacional (Santander-Madrid) para darle el paso cuando no venían coches, preparar el carro para hacer el agosto, plantar la huerta, sallar, resallar.
-LA SENCILLEZ: Con ella aprendí yo que los praos, lo mismo que las vacas tienen nombre propio. El prao de laVarga no es un prao cualquiera, es el prao de la Fragua.
Me repetía siempre sin pereza, como uno era capaz de sobrevivir en la vida con facilidad: no metiéndose bocados más grandes que los que puedas masticar. Escucharle como fueron sus comienzos económicos y su prosperidad  en la vida, eran lecciones particulares sin precio de lo que para mí es el primer cimiento de nuestro camino por la vida... es LA CULTURA DEL ESFUERZO.
  -EL AMOR AL TRABAJO: Ella sería hoy una mujer rural, lo que en la ciudad se llama una mujer realizada, de las que reciben premios, por trabajar sin parar  en un mundo de hombres, con las dificultades que añadía la época en la que vivió. Era un ganadero más, pero en femenino, le añadía su toque femenino, el que en su época estaba designado solo a las mujeres, sostenía la teoría que las vacas debían estar limpias, porque eso era señal
indiscutible que las cuadras estaban limpias, una vaca con costras indicaba para ella que esa persona mostraba al mundo como  tenía su propia casa. La huerta, la recogida de los frutales, el ordeño, la casa, la feria, los tratos.

-LA DEDICACIÓN A LOS DEMAS: Todos los niños de Molledo, incluyendo a los veraneantes hemos llevado sus vacas al prao del agua o hemos subido a su carro de hierba cargado hasta arriba. Además de un zoológico a la mano de cualquiera, su casa ha sido un restaurante sin horarios de cocina ni  número de cubiertos restringido, un supermercado constante de huevos, hortalizas y nueces.  Después de una vida dura de trabajo Dios le quiso premiar con una vejez sin dolores, y hasta el anteúltimo minuto con la cabeza en su sitio, pero incluso cuando se le descolocó, lo primero que te decía al verte cogiéndote la cara con las dos manos a la vez: "...ay!dame un beso, pero cuanto te quiero..."
Los dos decidieron irse en mayo. Él dos años y dos días más tarde. Pensando, pensando me doy cuenta todo lo que tenían en común.Todo lo que somos, lo aprendemos en la escuela,  en nuestras familias, pero también somos esponjas que aprendemos de quienes nos rodean y yo en este sentido he sido una persona privilegiada, he tenido dos grandes maestros. Luis y Mariuca, han sido algunos de los míos. A Mariuca yo le debía esto, empecé a escribirlo hace dos años, pero razones ajenas a mi voluntad me lo impidieron y hoy ha sido el día. Este año el programa de ferias va a tener algunos lectores menos, cada uno sabemos quiénes son. No los nombro para no olvidar a otros. Todos están en nuestro corazón y así siguen entre nosotros, solo dejamos de verlos. Escuché a una persona leer entre lágrimas un párrafo de un libro muy nuestro,  que dice que los pueblos los forman aquellas personas que pasaron por aquí y nos acompañaron.

Luis y Mariuca, me alegro de haberos conocido. Gracias por todo lo aprendido
           


 

8 comentarios:

Ó dijo...

¡Chapó por estas líneas!

Noemí dijo...

Tal vez me precipite en mi observación, pero la entrada da pie a pensar que se entregó para ser publicado en el programa, y no se hizo.
Si me equivoco en la apreciación, rectifico. Si no, y por lo tanto fuera verdad lo que creo, me parece deleznable y mezquino NEGARSE A PUBLICAR ningún escrito que se ofrezca, máxime cuando se trata del reconocimiento público de dos vecinos -muy queridos por algunos- de Molledo. Y me alegra haber tenido la oportunidad de leerlo. Gracias a quien lo escribió, porque demuestra una gran riqueza de sentimientos, y, como bien nacido, es agradecido. Y gracias al "editor" por haberlo publicado en tu blog, porque es una ventana al mundo.

Angel Lopez dijo...

Que te precipitas está bastante claro.En ningún momento se ha rechazado ningún escrito para el libro de fiestas.En cuanto a las palabras deleznable y mezquino esas son una serie de acciones hechas por personas que luego se creen abanderados de Molledo.Y lo sabes muy bien verdad.

jorge.andeco@gmail.com dijo...

Antes de que la sangre “pase” por el río debo decir algunas palabras que espero sirvan para relajar unos comentarios que precisan ser puntualizados por mi parte como responsable del medio en el que se emiten.
Según la comisión y en concreto contigo Angel, estuvimos hablando de los motivos por los que no se publicó en el programa de fiestas y que creo deberían ser conocidos: según vosotros no fue posible porque aún manteniendo el anonimato del autor en el programa, lo que sí se le exigía era conocer por vuestra parte quien es la persona que lo escribe, para que en caso de que alguien pudiera sentirse ofendido, por el motivo que fuere, ustedes supieran a quien dirigir la falta. Esa es una regla que impusieron y que, por supuesto, hay que respetar.
En mi caso y dado que sí conozco a el/la autor/a, lo único que he hecho, ha sido hablar con la familia implicada y una vez dada su aprobación, no ha habido ningún problema. Ahora bien, también he de decir que si no conociese al autor, es muy probable que también lo hubiera publicado dado que se trata de un texto con un contenido absolutamente inocuo de reconocimiento público a dos personas, sin ningún contenido injurioso.
Así que... apelando a la responsabilidad que cada uno tiene de su propio dominio, opino que los insultos afean nuestras conductas y por tanto no deberían tener cabida en ningún foro por grande o pequeño que éste sea. Un abrazo y un saludo

Angel Lopez dijo...

Todavía estamos esperando contestación a este e-mail que se mandó al recibir este escrito.Esperamos rectificación.De: Fernandez Ríos, Jose Manuel
Enviado el: martes, 08 de julio de 2014 10:36
Para: 'campurrianucas@gmail.com'
Asunto: RV: Artículo para el Libro de Ferias



Buenos días,



Mi nombre es José Manuel Fernández y soy el concejal de festejos del Ayuntamiento de Molledo.



En primer lugar me gustaría darte las gracias por el artículo que me han hecho llegar para publicar en el libro de Ferias y decirte que no hay ningún inconveniente en publicarlo, pero en los casos como este en que el artículo hace referencia a personas en particular y fallecidas ya, se podría publicar como anónimo pero no sin saber, al menos yo, quien lo escribe.



Nunca hemos tenido ningún problema de índole personal (es más a los familiares les suele gustar mucho ver este tipo de cosas, fotos, artículos, etc….) pero comprenderás que en el hipotético caso de que esto ocurriera como representante del Ayuntamiento no puedo mostrar desconocimiento sobre el autor de la publicación.



Si puedo garantizarte la privacidad, si así lo deseas en el supuesto normal de cualquier publicación, así como ponerme en contacto con los familiares directos de las dos personas a las que haces mención y pedirles su consentimiento para la publicación del artículo, por supuesto sin enseñárselo, si tu no pudieras hacerlo o no lo tienes ya.



Agradecería te pusieras en contacto conmigo, vía e-mail o a través de mi teléfono 625395378.



Saludos, José Manuel





----- Original Message -----

From: Centro Cultural Evaristo Silio Molledo

To: Ayuntamiento Molledo

Sent: Tuesday, July 01, 2014 11:07 AM

Subject: Fwd: Artículo para el Libro de Ferias





---------- Mensaje reenviado ----------
De: Campurriana de Reinosa
Fecha: 1 de julio de 2014, 10:37
Asunto: Artículo para el Libro de Ferias
Para: centroculturalmolledo@gmail.com



Buenos días,



Me piden que les remita, un artículo que desea que sea publicado en su Libro de Ferias de este años.



Les agradecería muchísimo que me mandaran un mail confirmando la recepción del artículo y si puede encajar en su publicación.



A la espera de sus noticias, reciban un cordial saludo,



M.L.

Noemí dijo...

Jorge, gracias por tus explicaciones, que hacen que entienda mejor el tema.
Angel, gracias por el mail que lo explica muy claro.
Entended ambos que, tal y como comienza el escrito, la duda era razonable.
Como ya escribí, si me equivoco en la apreciación, rectifico. Y eso hago ahora añadiendo sólo que mi intención no era insultar, porque no suelo hacerlo, sino adjetivar una acción. Algo que me parecía mal, sin llamar malo a nadie.

Anónimo dijo...

Pero como habéis podido convertir un precioso artículo en una farragosa retaila de dimes y diretes, imposible estropearlo mas.por favor dejar que lo leamos sin comentarios totalmente fuera de lugar y forma.

Ferran Moreno Guerra dijo...

Hoy he descubierto este bolg, y cual es mi sorpresa ya que en el mismo veo una foto de mi tía Mariuca, y entro a leer estas preciosas lineas dedicadas a ella y a "Chimbo" y no puedo evitar el emocionarme, ya que era la última de los hermanos que quedaba y era la que más se parecía a mi madre, Cionín.
Cuando estoy saboreando todavía de los recuerdos y la emociones, leo con estupor los desafortunados comentarios al final de esta entrada, y es que siempre tiene que haber un..... y a veces hasta dos.
Doy las gracias a anonymus con su entrada de 1/10/14, gracias por esa sensatez y por expresar tu indignación de manera tan educada, en la cual me he reflejado para escribir estas lineas, en las cuales intento expresar mi malestar con total corrección, y no como me pide el cuerpo.
Al autor de estas lineas, quiero agradecerte el que hayas instalado en estos momentos esos recuerdos de mi niñez. de esas noches de cartas de mis padres con mis tías, de esa leche recién hervida, de esos veranos en que fuimos tan y tan felices, gracias de nuevo.
Si nos vemos por el pueblo recuerdame que te debo un café.

Fiestas de Molledo 2022